Bulbel (2da Parte)

Ha llegado el momento de escribir sobre esto que he guardado ya por un tiempo, un cúmulo de sentimientos reprimidos y contenidos en una canción de la que ya escribí anteriormente, pero que no me atreví a mencionar el otro significado que tiene para mí.

La canción como se puede ver en el título es Bulbel de Mili, el cual es el soundtrack al final del juego Ender Lilies y del que sigo pensando: es una obra maestra.

Siempre que imagino que ya no existirá un juego que pueda cambiar mi vida o que llegue a ser lo suficientemente especial para quedar en mi memoria visual y sonora, llegan joyas como esta.

Pero ¿qué le hace tan especial?

Hoy después de vivir la insoportable levedad del ser, tumbado en mi sillón, digiriendo aun la separación con mi ex-pareja (Lili). Sin pensarlo, de pronto me encontré a mí mismo ahí; rodeado de miles de objetos; anclas emocionales del pasado, todos agujeros en distintas tonalidades de negro, donde aquellos más grises parecen tener un poco de luz en que me hacen creer que todo estará bien.

Es aquí en este sillón, que recordé como a lo largo de mi vida he escrito muchas frases de canciones, unas que me inspiran, unas me recuerdan cosas tristes, otras más que me recuerdan duelos, otras tantas que evocan las discusiones en mi cabeza y otras más como ésta que tienen distintos significados dependiendo del contexto.

Viene a mi memoria aquellos días cuando cursaba la secundaria y posteriormente la preparatoria, transcribía canciones enteras, escritas a máquina de escribir, en la computadora, en papeles, servilletas o incluso en mis propias manos usando plumón, pluma o cualquier cosa con la que pudiese escribir, todo con el afán de sacar de mi cabeza a la realidad esas frases que tanto rondaban en mi mente, frases cargadas de un profundo sentir y significado.

Es así como replicando aquella dinámica de poner frases con música, ahora se convertirán en historias en Instagram y de lo cual comencé a hacer un compilado y es ahí donde recordé esta canción.

Una canción que habla de mi relación con Lili.

Esta ocasión no estoy usando editor por lo que he escrito esto como me ha venido a la cabeza y será a manera de catarsis un desmenuzamiento de la canción y de lo que me hace sentir y recordar con cada línea y estrofa.

Comienza así:

I’m lost in your world

Que puedo decir que no sea explícito desde la primera línea, me encuentro perdido, en su mundo, pues de un tiempo para acá sentí que me encontraba perdido en algún lugar ajeno, uno que no se siente como mío, uno donde la prioridad eran sus ideas y sus reglas.

Looking for a purpose that belongs to me only

La salida es obvia; en ese mundo donde me encuentro perdido busco un propósito que me pertenezca solo a mí y fue a través de la terapia psicológica que por fin encontré un norte, una dirección y una forma de saber que quiero y de eso se desprende muy fácilmente “hacia donde ir”, por eso lo buscaba con desesperación.

May the lilies bloom for me

Una plegaria, una forma poética de pedirle a dios, a la vida o a cualquier ente superior con el poder suficiente para escucharme, que tengo un deseo genuino: “Ojalá los lirios puedan florecer para mí”.

Cuánta carga emocional en una sola línea, pues fácilmente puedo asociarlo a Lili o en el juego a las “Lili’s” que también están representadas por las flores de las que ya hablé en el post Bulbel – Ender Lillies

Do you hear the lilies speak?

¿Escuchas a las Lili’s/lirios hablar?, una pregunta que me invita a cuestionarme si le escuchaba o también de preguntarme si le hacía caso a esas otras personas que bien podían ser mis amigos, mis familiares, mis “yo” pasados o incluso las otras voces en mi cabeza.

The leaves kissing the bees
The soil covering up all the sorrow
All the seeds I sowed
In a garden can’t be claimed by me

Una metáfora sencilla pero acertada, en esta relación donde yo sentía que las hojas besan a las abejas, un anima de voluntad pasiva a una tempestiva siempre en movimiento, en un ambiente donde en el gran dibujo uno piensa que esa interacción sencilla entre la flor y la abeja significa que las cosas están “bien”, pero es obvio que es una tapadera y con esa ilusión cubrí mis penas. Y entonces me pregunto sobre todas esas semillas que planté, en una metáfora donde esas semillas son todas aquellas pequeñas cosas que hice pensando en ella, ahora es visible que los frutos de esas semillas no pueden ser reclamados por mi, pues están en su jardín.

Do you hear the lilies speak?

Nuevamente ¿escucho a los lirios hablar?, pareciera repetirse constantemente ese pensamiento, donde me cuestiono si le estoy escuchando o no, si solo son invenciones mías, si solo yo me esfuerzo en vano o si en verdad soy el monstruo que falla en todo por no escuchar atentamente.

I gave it my all
Isn’t it supposed to be sunny now?
But my rain won’t stop
My rain won’t stop

Y es que justo ahora viene un cuestionamiento profundo que me hace replantearme todo de nuevo: lo di todo, ¿no se supone que debería estar soleado ahora?, ¿por qué?, ¿POR QUÉ?… ¿por qué ahora es así?… no importa, porque incluso si lo supiera, no para de llover, la metáfora con el llanto interno me desborda y no parará, encapsulando un momento de mi desaliento, de decepción, de desesperanza, de rabia, de sentimientos contenidos porque siento que me esforcé y ¿por qué no hay felicidad?

Una verdadera obra que encaja de manera paralela la trama del juego, con lo que siente la protagonista y con lo que sentí en la relación y lo que siento ahora.

The hell I saw, voices I heard
The dreams that I lost changed nothing at all
I’m still my insufferable self
Setting my hair on fire
Giving you warmth
Hoping you’d rеalize I want you by my side
May the liliеs bloom for me

La estrofa que es el preludio de todo, uno recuerda haber ya vivido el infierno antes, en otras relaciones, en otras decepciones, en otros momentos tristes de la vida, escuchado muchas voces, de amigos, familiares, compañeros y esas voces internas que te dicen que hacer, que dudan de ti, que te animan o que incluso están ahí para decirte que no deberías existir.

Los sueños han cambiado con el tiempo, porque después de 12 años ya no deseaba lo mismo que el joven de aquel entonces, pero incluso sabiendo eso no cambiaría nada, pues el único acompañante que tengo para toda la vida es mi “insufrible” YO, porque eso pareciera que era, un monstruo egoísta e irresponsable, un detestable cúmulo de rocas en un saco inerte, incapaz de pensar en alguien más.

Pero eso se contrasta con la percepción de uno mismo donde uno se esfuerza para poder dar aquello que no tuvo en su momento a la otra persona, un poco de comprensión, amor y consideración, para calentarle a costa de quemarse las manos. Un sacrificio que uno hace, esperando que el otro pueda darse cuenta que es para demostrar que quiere estar a su lado.

Pero después de la vorágine de pensamientos, sale de mi boca como siempre el mismo anhelo en forma de plegaria: “Ojalá los lirios puedan florecer para mí”.

Thought I would be satisfied
Seeing you content at the other side

En verdad creí que estaría satisfecha, sobre todo por todos esos momentos que le vi sonreír al otro lado de mis ojos, en la realidad que muchas veces consideré que debían ser momentos eternos donde el tiempo se detuviera y pudiese permanecer en ese momento perfecto.

But somehow, I thought these crazy thoughts
That I deserve to be loved
I deserve to know love
We deserve to live in love

Pero de alguna manera sabía por dentro que no era así, era una fantasía que no existe en la realidad, los momentos eternos no existen, encapsular momentos y guardarlos como la realidad solo me llevan a la frustración cuando la realidad me planta cara y me dice: de fantasías no puedes vivir. Y es entonces que caigo en cuenta y me llegan esos pensamientos que suenan “locos”, esos pensamientos que dicen: “merezco ser amado”, “merezco conocer el amor”, pero no solo yo… ambos “merecemos vivir amados”.

I wish there’s no end
I wish there’s no end to our time together

Pero la fantasía solo es aquella ancla que me decía que no quería que terminara, que nuestra historia juntos aún no tenía por qué acabar. Todos esos deseos que por momentos vivimos, los objetos, las experiencias, las caricias, las consideraciones, los regalos… todo eso no quería que terminara.

The lilies wilted
Waving down into my coffin
Goodbye, my youth expensed
Goodbye, my innocence

Y de pronto ocurrió: los lirios se marchitaron, todo eso que era bueno no logró sostener la realidad actual, donde había tanto resentimiento, tanta violencia en cada comentario hiriente, tanto disgusto en cada acción no realizada y cada una de esas cosas se convirtieron en una flor que caía al ataúd de nuestra relación y ¿qué queda al final? un simple adios a la juventud gastada, adios a esa inocencia interior que tenía o teníamos de lo que se suponía fuera una relación.

Should I be mad? Should I be glad?
Am I enough?
How can I be enough so I’m proud of myself?
Reaching my goals
Distracting my feelings changed nothing at all
I’m still my insatiable self
Isn’t it better to be dumb?
To be ignorant? Not knowing there is liberty
In this world not meant for me
May the lilies bloom for me

Y al final con una furia contundente, llegan esas preguntas que se me arremolinan en la cabeza, al ya no saber que sentir no puedo evitar preguntarme justo lo que dice la canción: ¿debería estar enojado? ¿debería estar contento? ¿cómo puedo llegar a ser suficiente de tal manera que esté orgulloso de mi mismo?, alcanzando mis metas, distraer mis sentimientos no cambió nada en absoluto, sigo siendo mi insaciable YO… y grito con todas mis fuerzas en mi interior con una rabia contenida en busca de respuestas, con una furia catártica que clama por justicia, por una guía, una luz que me permita ver que camino debo seguir: ¿no sería más fácil ser tonto? sin saber que la libertad existe en un mundo que no fue hecho para mí. Esas palabras penetran en lo más profundo de mi ser, quizá es muy dramático, pero es algo que me ha recorrido la cabeza toda la vida, no precisamente por sentirme alguien diferente, sino alguien que pese a ser muy adaptable, no logró encontrar una pertenencia en un mundo donde ser crítico, saber un poco más de lo que uno encuentra en promedio en las redes sociales nunca es valorado como algo positivo, sino como algo disruptor, algo que es rechazado por ser diferente porque no confirmó los sesgos de los demás.

Y pese a todo eso que siento por dentro, algo en mi interior sigue con esperanza y anhelo preguntando al vacío: “Ojalá los lirios puedan florecer para mí”.

Y así termina todo esto que me pasa cada ocasión que escucho con mucha atención la canción, pues al digerir palabra por palabra evoco todos esos sentimientos, me transporta a ese momento donde todo ocurrió, todos esos eventos que desencadenan ese pesar, esa rabia, esa búsqueda de una justicia que nunca llega, de maldecir a los astros, a dios y al destino y todo aquello que promete con fuerzas divinas vindicar la vida de cualquiera que crea en ellos. Pero en este vacío teológico que tengo en la cabeza y el corazón solo quedo yo, no como un dios, sino como lo contrario, un ser humano, imperfecto, incapaz de hacer todo bien y por esa misma condición es inevitable culparme de mi propio destino y eso me lleva a un desprecio por mi ser, por mi forma de actuar, porque a sabiendas de tener herramientas que me permiten avanzar de maneras más sanas, me encuentro aquí, envuelto en más preguntas que respuestas, envuelto en un mar de sentimientos de pena, angustia, tristeza, pérdida… un dolor en el pecho y en el alma que solo busca un poco de confort sentimental a cambio de cualquier tipo de moneda, pues la importancia no radica en la simetría del trato, sino del significado que tiene para mí el producto de esa transacción.

Por todo ello, esta canción me lleva a transitar por muchas emociones, por recuerdos, deseos frustrados, ganas de mejorar, de preguntas existenciales, de tristeza, rabia, emoción y una ventana a los deseos más profundos de mi corazón, a una herida que nunca sana y a un vacío que nunca se llena…

Y frente a toda desesperación, de abandono, soledad, extravío, aislamiento y desamparo le digo a la vida: “Ojalá los lirios puedan florecer para mí”.

(Fin)